Información
El Príncep Feliç
- Oscar Wilde
- Dirección Jorge Picó
- Sala Petita
- 11/12/2014 al 11/01/2015
Entre los cuentos que han viajado en el imaginario occidental como principales referentes de la literatura dirigida a los más pequeños destaca este texto de Oscar Wilde que también da título a la versión teatral que ha hecho la compañía La Baldufa con dirección de Jorge Picó.
El Príncep Feliç es la historia de una majestuosa estatua que domina una ciudad. Esta había sido un príncipe con una vida fácil y lujosa, completamente despreocupado de lo que pasaba más allá de los muros de su castillo. Ahora permanece unido a aquella escultura inmóvil y suntuosa, bañada en oro y con piedras preciosas. Pero ahora ya no es feliz. Desde su privilegiada atalaya, puede observar la miseria de gran parte de los habitantes de la ciudad; la pobreza que antes desconocía, ahora se convierte en su dolor y cada noche llora cargado de impotencia por no poder ayudarles.
Un día, una golondrina que pasa por la ciudad camino a África se refugia a los pies de la estatua para pasar la noche. Cuando ve su tristeza se compadece y accede a ayudarla aun sabiendo que no tiene mucho tiempo, el invierno ya está aquí y tiene que emigrar hacia las tierras cálidas donde la esperan sus compañeras. Y la golondrina, guiada por el Príncipe, va arrancando todos los materiales preciosos que lo cubren para llevarlos a las personas que lo necesitan. Una lección de humanidad, de amor y de generosidad.
A FONDO
Un día, una golondrina que pasa por la ciudad camino a África se refugia a los pies de la estatua para pasar la noche. Cuando ve su tristeza se compadece y accede a ayudarla aun sabiendo que no tiene mucho tiempo, el invierno ya está aquí y tiene que emigrar hacia las tierras cálidas donde la esperan sus compañeras.
Y la golondrina, guiada por el Príncipe, va arrancando todos los materiales preciosos que lo cubren para llevarlos a las personas que lo necesitan.
Cuando yo vivía, tenía un corazón humano —contestó la estatua— pero no sabía qué eran las lágrimas, porque vivía en la Mansión de la Despreocupación, donde no se permite que entre el dolor. Así, todos los días jugaba en el jardín con los compañeros y de noche bailábamos en el gran salón. Alrededor del Palacio se alzaba un muro alto, pero nunca sentí ningún tipo de curiosidad por conocer qué había más allá...
(Oscar Wilde, El Príncep Feliç)
Ficha artística
- Autoría
- Oscar Wilde
- Dirección
- Jorge Picó