Déjà vu

Cia. Manolo Alcántara

Circo que difumina con humor las fronteres entre la realidad y la fantasia

Déjà vu nos habla de la distancia entre una persona y sus sueños, de lo que es y lo que querría ser. Sueños muy ambiciosos que despiertan sus aires de grandeza pero a la vez imposibles, que lo abocan al desánimo.


Un espectáculo visual, sin texto, donde se difuminan las fronteras entre realidad y fantasía a partir de una historia con un punto de melancolía y con un espacio escénico que juega con la desproporción extrema de las medidas.


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Mis creaciones parten de una búsqueda interior: de mis aciertos, de mis miedos, angustias, delirios... Una elección que mimetiza el yo con mis seres queridos. Una trilogía emocional, mi padre, mi madre y mi hijo, que se corresponde con Rudo, Déjà vu y Maña y articula el pasado y el presente.

Empezó con Rudo. Rudo es mi padre, campesino la mitad de su vida y albañil la otra mitad. Un espectáculo que contrastaba la dureza de un oficio con la ternura de un padre.

Maña es mi hijo. Es la trasmisión de conocimiento de un abuelo a un nieto, la transformación de artesano a artista.

Y Déjà vu, que es mi madre, ama de casa durante la posguerra. Un espectáculo onírico, soñador y un poco quijotesco.


Manolo Alcántara